1. Alucinar con las mágicas auroras boreales
Dejarte seducir por las auroras boreales y sentirte como en otro planeta es uno de los principales reclamos de la mayor parte de los viajeros que eligen Laponia como destino.
Sin lugar a dudas, una luz única con colores indescriptibles, perfecta para hacer fotos, y sobre todo, capturar el momento para siempre en nuestra retina.
Puedes hacerlo por libre o reservar una actividad en la que te llevarán a puntos con buena visibilidad de auroras boreales, mientras os calentáis al calor de una hoguera. Además, incluye la recogida y vuelta a vuestro alojamiento, así como una estupenda cena.
2. Dormir en un iglú de cristal
Dormir en un hotel con habitaciones de cristal en los alrededores de Rovaniemi y ver las auroras boreales desde tu cama es un auténtico lujo terrenal. Si lo haces, resérvalo con tiempo, ya que suelen llenarse con meses de antelación.
Kakslauttanen Hotel es uno de los mejores, aunque no es apto para todos los bolsillos. Te dejamos otras opciones interesantes en nuestro post sobre hoteles con encanto en Laponia.
3. Cruzar y bañarte en el Mar Báltico
Cruzar las gélidas aguas del Mar Báltico en el rompehielos Sampo y escuchar el crujido del hielo a tu paso no es una experiencia que se viva todos los días.
Si lo deseas, puedes cruzar en un rompehielos y después bañarte en sus gélidas aguas con el equipo adecuado. Te recomendamos reservar la actividad con mucha antelación, si está entre tus planes, aunque te adelantamos que es una actividad muy cara pero súper especial.
4. Dar un paseo en trineo de huskies
¿Quién no soño de pequeño con hacer un recorrido en trineo de huskies?
Una de las experiencias más impresionantes que vivimos en Laponia fue esta. Eso sí, vete bien abrigado, ya que notarás el contraste del frío al coger velocidad. Aún así, si se te olvida algo, la mayoría de compañías tienen multitud de material para que no mueras congelado ;).
También puedes visitar una granja de huskies, con traslado incluído, guía en español, y por supuesto, un paseo en trineo incluído.
5. Cruzar el Círculo Polar Ártico
Una línea más allá de la cual el sol no sale durante al menos un día en invierno, momento perfecto para avistar las auroras boreales. Por otro lado, en verano los días son muy largos, y podrás disfrutar del sol de medianoche.
6. Pescar en el hielo
Pescar en el hielo haciendo agujeros en un lago congelado como un en una escena de cómic de esquimales.
Aquí te dejamos una opción perfecta si quieres reservar tu excursión con antelación.
7. Disfrutar de amaneceres brutales
El mejor amanecer que puedas imaginarte, puede verse desde alguna de sus montañas. Sobre el blanco nuclear de la nieve, una infinita gama de tonos cubrirá el cielo. ¡Indescriptible!
8. Subir en una oruga de nieve
Subir en oruga de nieve a la cima de la colina de Lampivaara, en el Parque Nacional de Pyha-Luosto, es una experiencia única. Te quedarás impresionado al ver metros y metros acumulados de nieve, que no podrías cruzar de ninguna otra forma.
9. Visitar una mina de amatistas
Si visitas la mina de amatistas de Pyha-Luosto, podrás llevarte una de recuerdo, siempre y cuando te quepa dentro del puño cerrado.
Puedes hacerlo por tu cuenta e ir en coche y reservar la entrada en su web, o también puedes contratar esta excursión desde Rovaniemi en la que te incluyen todo lo necesario.
10. Visitar el pueblo de Papa Noel en Rovaniemi
Hay un lugar en el mundo en el que puedes conocer al auténtico Papa Noel, y ese rincón es Rovaniemi. Se trata de un espacio dedicado al personaje preferido de los niños (y no tan niños), en el que hay muchas actividades relacionadas con la temática que puedes hacer.
Sin duda, un destino maravilloso para ir con los más pequeños y disfrutar con ilusión.
11. Llevarte el sello del Círculo Polar Ártico en el pasaporte
Si quieres puedes llevarte un recuerdo para toda la vida al poner el sello del Círculo Polar Ártico en tu pasaporte por un módico precio. Aprovecha tu visita a Papá Noel, y en el edificio de enfrente, podrás hacerlo.
12. Conseguir que Papa Noel envíe una carta dedicada
Volvemos a la ilusión con un detalle que dejará ojiplático al niño al que elijas obsequiar. ¿Con qué? Con una carta dedicada por el mismísimo Papa Noel.
13. Hacer un trekking con raquetas de nieve
¿Por qué no hacer algo de ejercicio durante el viajae para entrar en calor? Y no en un paraje cualquiera, sino alrededor de un lago helado en Inari, rumbo a la visita de la iglesia de Piepeljarven.
Se trata de una ruta entre montones de nieve, por lo que resulta cansada, y no es recomendable si vas con niños pequeños.
Te dejamos esta opción que incluye el traslado desde el hotel, el material, ropa térmica e includo un aperitivo.
14.Visitar el Lago Inari
El 2º lago más grande de Finlandia es el Inari. Para poder disfrutar de su inmensidad y belleza, sobre todo si está congelado, puedes hacer una visita que realmente merece la pena. Si vas en invierno, alquila unas raquetas de nieve, la forma más cómoda y rápida de llegar a este largo.
15. Sobrevolar la Laponia Finlandesa
No necesitarás un dron para ver y hacer fotos desde el aire de la Laponia Finlandesa. ¿Cómo? Sobrevolando el territorio en helicóptero, una experiencia que ya de por si merece la pena, y más aún ante unas vistas que te dejarán sin palabras.
16. Dar un paseo en trineo tirado por renos
Disfrutar de un paseo en un trineo tirado por renos es una actividad divertidísima y una de las más idílicas del destino. Eso si, vete abrigado, ya que al estar parado durante el trayecto, notarás el frío como nunca.
También puedes visitar una granja de renos, con traslado incluído, guía en español, y por supuesto, un paseo en trineo incluído.
17. Visitar un pueblo entero de hielo
El Snow Village, o el pueblo helado, abarca mas de 20.000 m2, e incluye un hotel, un bar, una capilla… ¡y todo de hielo¡ Es, sin duda, uno de los parajes únicos que debes ver.
18. Visitar un pueblo Sami
Conocer las costumbres de un pueblo Sami, el pueblo aborigen asentado más allá del Círculo Polar Ártico, y que tiene presencia en Finlandia, Suecia, Noruega, o incluso Rusia.
19. Hacer un paseo en moto de nieve
Si te gusta la aventura, el motor y la naturaleza puedes combinar tus pasiones con una vista a alguno de los parques nacionales lapones en moto de nieve. Un momento perfecto para disfrutar del territorio en estado puro.
Te dejó una actividad organizada para montar en moto de nieve desde Rovaniemi, una experiencia única.
20. Dormir en una típica casa finlandesa de madera
21. Hacer nubes de algodón
Los viajeros más foodies no pueden irse de Laponia sin hacer nubes de algodón alrededor de la chimenea en una casa típica finlandesa.
22. Ver un zoo en plena naturaleza en Ranua
Si amas a los animales tienes que visitar el zoo de Ranua. Aquí encontrarás osos polares, zorros árticos, huskies, renos y todo tipo de aves en su medio natural.
Si no dispones de coche, puedes reservar esta excursión que incluye transporte y guía en español. Te recogerán en tu hotel, incluyendo el transporte en minibus, el guía en español y la entrada al zoo.
23. Relajarte en una sauna
Porque en todo viaje tiene que haber momento para el relax y el descanso, tu momento perfecto podría ser disfrutar de una sauna tras un largo día de excursión.
24. Bañarte en las aguas glaciares
Bañarte en las aguas glaciares tras una relajante sauna y experimentar una explosión de contrastes al pasar del máximo calor, a un frío gélido. Se trata de una experiencia increíble, y muy buena para la circulación ¿te atreves a hacerlo?
25. Visitar un centro de cuidado de renos y ver renos de todas las edades
26. Esquiar por la noche
Esquiar por la noche en alguna de las estaciones de esquí de Levi, en el norte de Laponia, es el sueño de todo esquiador. Aquí puedes obtener más información.
27. Degustar la gastronomía local
El salmón y el reno son dos productos que debes probar si quieres conocer la gastronomía local. El primero se suele degustar en sopa, mientras que el reno lo puedes encontrar de mil y una formas posibles.
28. Ver los mejores atardeceres que te puedas imaginar
29. Fotografiar renos en libertad
30. Disfrutar de la tranquilidad y el silencio
En definitiva, disfruta, déjate seducir por los paisajes y respira aire puro. Dedica momentos del viaje para el relax y para la aventura, y saborea cada momento.
Laponia es un paraje perfecto para desconectar y olvidarnos, gracias a su silencio mágico, del estrés que acumulamos con las prisas y ritmos de la rutina. Unos días en plena naturaleza contrarrestarán una larga temporada en el bullicio de la ciudad.